“Cinco triunfos seguidos no son poca cosa”, remarcó Frank Kudelka para enaltecer el trabajo de sus dirigidos en el sprint final del año. Es que, más allá del contexto y los adversarios, la cifra no es para nada despreciable. Una muestra cabal de la dificultad que supone esta estadística es que hacía siete años que Newell’s no hilvanaba una racha semejante. Lógicamente, para el hincha es mejor no recordar cómo prosiguió la historia para para aquel equipo que entrenaba Alfredo Jesús Berti. Lo concreto es que este fin del 2020 en ganador le permite a la Lepra disputar tres competencias y aún conservar opciones latentes de clasificar a la Sudamericana 2022, un premio decididamente menor de acuerdo al objetivo primordial. Pero el plantel no podía dormirse en los laureles y quedarse con el mal comienzo. Había que ser resilientes y decorar el último tramo futbolístico del año.
Es justo remarcar que gran parte de la racha se engendró ante rivales de poco relieve y que incluso el propio formato del torneo no ilusiona. Sin embargo, existen una infinidad de antecedentes en los que un equipo que presumía como favorito perdió ante un rival menor. La propia historia de Newell’s atestigua varios capítulos olvidables. Por eso, ganar cinco partidos en tres semanas tiene un mérito reconocible. Marcar en el verde césped la superioridad y prevalecer en el resultado es lo más importante, sobre todo a una estructura de Kudelka que se le exige regularidad. Y para ello, qué mejor que hacerse camino al andar acumulando victorias y con la inserción y consolidación de muchos chicos del club.
En este trajín, NOB anotó 12 goles y solo recibió dos tantos. Se produjeron buenas actuaciones, como ante Godoy Cruz y Central Córdoba; y otras más deficientes, como contra Estudiantes y Sportivo Peñarol. Ante Lanús, donde empezó todo, el desempeño fue discreto. Pero, al margen de las estadísticas, Kudelka encontró en Cacciabue a un jugador que puede ser titular, a Alexis y Enzo Cabrera – todos de la cantera rojinegra – como cartas ofensivas y a otros juveniles que piden pista. Es una buena forma de afrontar y lidiar con un parte médico cada vez más repleto de bajas, como la del propio Panchito González, que antes de la lesión era una fija . Además, el entrenador sabe que puede requerir de ellos cuando el calendario se comprima y las exigencias sean más importantes.
Sin dudas una de las cuestiones más estimulantes radica en que la Lepra acompañó a esta seguidilla positiva con la inserción de juveniles en el primer equipo. En los últimos cotejos, tuvieron su oportunidad futbolistas como Luciano Cingolani, Enzo Cabrera, Ramiro Sordo, Manuel Llano, Juan Sebastián Sforza y compañía. Incluso, algunos de tuvieron su bautismo de gol en este próspero diciembre. Otros como Campagnaro, Calcaterra, Calderara, Mansilla y Aguirre buscan su oportunidad. Lo importante, proyectando a futuro, es que estos jugadores invitan a pensar que Newell’s tendrá un plantel con más caudal y mayor cantidad de variantes. Y es positivo que los primeros pasos se den con victorias, que siempre permiten corregir errores con mayor tranquilidad. Además, como siempre dice Simeone, “ganar trae ganar”. Esa sana costumbre siempre es bienvenida.
Newell’s cumplió con los objetivos primarios que tenía para este 2020. Sin embargo, no pudo dar un salto de calidad y falló a la hora de ir por propósitos mayores. El equipo obtuvo la permanencia con holgura y clasificó a la Sudamericana pero finalizó la Superliga en un discreto 8º lugar. Y en el fútbol pos pandemia, no cumplió con las expectativas iniciales. El Rojinegro quedó relegado a la Zona de Complementación y ahora está intentando remediar la situación y busca quedarse con aspectos positivos para rescatar.
Estos encuentros deben ser un estímulo para probar variantes, darles rodaje a juveniles y, por supuesto, ganar para crecer en confianza. Al menos por ahora esas metas se cumplen. Pero Newell’s no puede conformarse con lograr solamente lo factible. Para el año que se avecina, las metas futbolísticas deben ser más auspiciosas. Y para alcanzarlas, muchos chicos castalepras empujan con fuerza y se presumen preparados para dar un paso al frente en un 2021 plagado de desafíos.

Licenciado en Comunicación Social. Master en Periodismo Deportivo.
Periodista en De Leprosos y Canallas. Redactor en Planeta Newell’s