Virginia Salera es periodista y trabaja en Newell’s desde hace varios años, los últimos tres haciéndolo en divisiones inferiores. Conformando dupla técnica con Mariano Faurlin, encabezan juntos la conducción del primer equipo de fútbol femenino de la lepra.
El fin de semana pasado, el plantel viajó al predio de Ezeiza para jugar una serie de partidos amistosos frente a la selección nacional y sobre ese tema comenzó la charla exclusiva para Planetanewells.com
“Fue una experiencia totalmente gratificante para todos. Desde el cuerpo técnico, a nivel dirigencial y mayormente para las chicas. Sentimos que fue una oportunidad enorme para ellas para poder mostrarse. Más allá de lo que podía llegar a ser el partido en sí mismo, fue acercar lo que es el fútbol rosarino con lo que es el de Buenos Aires, que hoy está bastante más desarrollado”, dijo sobre las sensaciones que le quedaron luego de la visita al predio de la AFA.
En cuanto a cómo surge la posibilidad de medirse frente a la albiceleste, aseguró que fue fabricada por el cuerpo técnico mismo. Respecto a esto explicó: “Tuvimos la posibilidad de contactarnos con el profe de la selección argentina y a través de él hacer el contacto. Sabíamos que las chicas (de la selección) se estaban preparando para una gira que están haciendo y que van a hacer amistosos en Estados Unidos. Creímos que era una linda oportunidad para aprovechar y para ponernos a disposición de la selección nacional”.
“Le veníamos anticipando a las chicas que había una sorpresa y que se pongan las pilas con la alimentación y los entrenamientos. Después de organizar el día y la hora, se lo dijimos después de un entrenamiento y la verdad que la reacción fue de muchísima alegría”.
Sobre cómo es formar parte de una dupla técnica, Virginia dijo que es su primera experiencia como entrenadora de campo y que por eso no podría hacer una comparación. En tanto, no dejó de hablar sobre su relación con su compañero directo de trabajo: “Con Mariano Faurlin ya había trabajado antes porque él es periodista y yo también hice la carrera de periodismo, aunque trabajé muy poquito y ya me dedique al fútbol. En ese tiempo del periodismo ya habíamos trabajado juntos y ya lo conocía”, y luego agregó: “Nos llevamos muy bien. Tenemos decisiones similares y al momento de tener diferencias se habla y se llega a un consenso. El grupo de trabajo en el que estamos es muy bueno”.
En cuanto a la conformación del plantel en sí dijo: “Tenemos chicas que ya venían jugando para otros equipos de fútbol 11 y chicas de otras ligas, como la Cañadense y la liga de Roldán. También hay chicas que vienen del fútbol de salón de Newell’s y de otros equipos también”.
“Fue todo un acomodamiento. La cancha de 11 no tienen nada que ver con lo que venían jugando ellas, sobre todo respecto a las de futsal. Nos estamos adaptando bien. Nosotras entrenamos en Malvinas, que son canchas de fútbol 7, y aprovechamos los sábados para poder venir a entrenar a Bella Vista y hacer un poco de funcionamiento para que las chicas se adapten más a los que son las dimensiones del fútbol de 11”.
En tanto, reafirmó lo dicho sobre la adaptación de las jugadoras, algo que se traduce también en números: “Todo fue bastante natural en lo que fue la transición dentro de la disciplina y se adaptaron muy bien. Por ser el primer torneo estamos recontrasatisfechas por cómo lo estamos llevando, estamos terceras en la tabla. Como una primera experiencia la verdad es que no nos lo imaginábamos”.
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Sobre la competencia contra los rivales directos en el torneo local (Central y Social Lux) aseguró: “Son dos equipos que hace muchos años que juegan juntos. Son los más fuertes dentro de la Liga Rosarina frente a los muchos equipos que nos sumamos recién este año y estamos empezando. Así y todo hay que pensar que hace 6 meses Newell’s no tenía equipo de fútbol femenino y hoy estamos peleando arriba frente a esos dos equipos que desde hace años juegan juntos”.
En tanto, Salera no obvió el hablar sobre los clásicos disputados donde hubo un saldo positivo a favor de Newell’s: “Lo que fue el resultado del clásico tampoco se esperaba. Era un equipo en formación, con dos meses de entrenamiento, frente a otro que lleva 8 años jugando. Sacamos un resultado histórico en el primer clásico y en el segundo que tuvimos la oportunidad de ganarlo”.
Para finalizar, continuó tirandole flores a lo logrado y dijo que “el balance es súper positivo, tanto en que las chicas se hayan adaptado así como también en que hayamos podido conformar un equipo competitivo en tan poco tiempo”.
Periodista.
Fanático del Scrabble.
