Culminó un semestre complejo para un Newell’s que recibió al nuevo año envuelto en incógnitas que deberán aclararse con el correr del 2021. De dichos cuestionamientos se desprenden las claves del futuro leproso en el corto plazo. Las deudas de Kudelka, las expectativas respecto a los torneos, el nivel de los futbolistas, la situación institucional, la continuidad de su capitán y mucho más, en estas diez preguntas.
1. ¿Qué debe cambiar Frank Kudelka?
Negar la influencia positiva de Kudelka en el juego leproso desde su llegada es necedad. Potenció el nivel de muchos jugadores, asentó un estilo y le permitió a la Lepra volver al plano internacional tras tres años. Dicho esto, el último semestre hizo sonar las alarmas del cuerpo técnico, que tuvo errores de lectura, de gestión de situaciones y de elección de jugadores durante la Copa Maradona que repercutieron negativamente. Al freyrense, su naturaleza no intervencionista le impidió integrar al trío de referentes sin restarle intensidad al equipo. Tampoco logró mejorar la performance durante los partidos a través de los cambios, y en algunos puestos no probó variantes ni buscó activar piezas relegadas del plantel durante el transcurso del certamen. De cara al 2021, el cuerpo técnico leproso tiene la misión de retomar la dinámica positiva interrumpida por la pandemia, de integrar al plantel a los jóvenes que prometan y de entregar una versión del equipo más fiable, menos proclive a las lesiones y menos dependiente de los destellos individuales. El primer paso hacia dicho objetivo, con el mercado abierto y de la mano de una planificación deportiva mancomunada, será definir cuál será el esquema. Del 4-3-3 del primer torneo, en la Lepra vimos un 4-3-1-2 y hasta un 4-4-2 durante la última Copa Maradona. La disposición que mejor se adapte a las características del plantel y que más variantes y dinámica ofrezca debería picar en punta.
2. ¿Seguirá extrañando Newell’s a Cristian Lema?
Hace rato que una salida de un futbolista en un puesto clave no atentaba tanto contra la solidez de un equipo. Se buscó reemplazar al ex-Belgrano con un Manuel Guanini que jamás aportó seguridad y quien cometió errores que costaron goles. Tampoco destacaron Fabricio Fontanini ni Santiago Gentiletti: el primero, entre expulsiones y lesiones quedó atrás en la consideración, mientras que el ex-Albacete bajó su rendimiento en comparación al ciclo 2019/2020. Manuel Capasso llegó y no alcanzó a debutar, al igual que el juvenil Facundo Mansilla (21) que fue un habitué entre los convocados pero sin ver minutos. Adquirir un funcionamiento defensivo no se logra en poco tiempo y los procesos de adaptación a un club como Newell’s no son gratuitos. Para colmo, durante la Copa Maradona la Lepra también se desmejoró en cuanto a las pelotas paradas. Dejó de ganar en el área rival y tuvo errores a la hora de defender en la propia. Tarea de quienes gestionan el plantel encontrar un primer central cuyas características se adapten al estilo y mejoren el nivel de la última línea, por arriba y por abajo.
3. ¿Mejorará la relación entre los hinchas y el equipo?
La sensación para el Mundo Newell’s respecto a las últimas performances es que la Lepra dejó pasar una importante oportunidad de volver a luchar por un título. Otros rivales de similar bagaje sí hicieron negocio con la Copa Maradona y las expectativas generadas en la previa quedaron sólo en eso. Las producciones futbolísticas reavivaron las dudas respecto a un rumbo futbolístico que se hizo difuso con el nivel mostrado y que preocupa al hincha de cara a un año clave. Durante el último torneo, el hecho de haber visto a un equipo poco dinámico y desmejorado respecto al semestre anterior reavivó la histeria en el ambiente. El ciclo de Kudelka supuso una mejoría evidente pero que no alcanza y los hinchas ya alzaron su voz: la exigencia será mayor y el 2021 incluye un horizonte decisivo por los desafíos deportivos y el futuro institucional, que también estará en juego. Otro de los grandes objetivos será volver a generar feeling entre el plantel profesional y la gente rojinegra que, al menos por un tiempo más, deberá seguir distanciada del Coloso Marcelo Bielsa.
4. ¿Se podrán integrar los referentes al sistema?
Durante la minipretemporada pandemial de septiembre, Kudelka buscó implementar un 4-3-1-2 para integrar a Ignacio Scocco al once titular. Sin embargo, en los partidos con esa disposición el equipo sufrió por demás en los costados y tanto la jerarquía de Boca como el rigor físico de Talleres expusieron aún más estas falencias. Sin dudas, la definición de funciones será importante en el armado 2021. Si se busca hacer cohabitar a Pablo Pérez, Maxi Rodríguez y a Nacho, el esquema precisará de escuderos dinámicos para el volante mixto, que pese a tener altibajos durante la Copa Maradona sigue demostrando que su sapiencia es imprescindible. Maxi, quien se transformó en mediapunta hace ya un año, pareciera pisar zonas parecidas a las del oriundo de Hughes, que se mantiene como la opción más clásica para jugar de referencia -pero sin ser un nueve de referencia per se-. A la espera de cómo se desenvuelve el mercado de pases, al ataque rojinegro parece ir sobrado de jerarquía al pie con el ‘11’ y el ‘32’. Ergo, todavía no tiene definido otros delanteros que se reconozcan como titulares ni un referente de área que compita con Scocco. El radio de acción de sus referentes le aporta a Newell’s un piso competitivo interesante, pero a su vez un techo colectivo que muchas veces lo limita a no defenderse bien y quedar partido. La búsqueda de sus acompañantes debe ir de la mano con un perfil de jugador que encaje en el sistema, más que por un nombre suelto.
5. ¿Y los juveniles?
El rol de los canteranos siempre es foco de debate en clave Newell’s. Durante el último año, muchos juveniles se integraron al trabajo con primera división, pero lo cierto es que todavía vimos poco de ellos en el primer equipo. Para quebrar esa dinámica, donde los chicos aparecen ante la urgencia y luego se caen de la consideración por las presiones para que jueguen apellidos ‘con más recorrido’, es imprescindible que el cuerpo técnico y los encargados de gestionar el fútbol se convenzan de que este el camino más fructífero. El contexto invita a utilizarlos y a la experiencia que el equipo ya posee se debe amalgamar junto a la sangre joven. Juan Sforza (18), Manuel Llano (21) y Luciano Cingolani (19) fueron una bocanada de aire fresco en un tramo donde el equipo ya estaba muy castigado por las bajas. Mención especial para Nicolás Castro (20) que ganó rodaje en el arranque del semestre y el COVID-19 lo apartó momentáneamente de la consideración. Éstos nombres, sumados a muchos otros que podrán sumarse desde la cantera, comprenden gran parte del material con el que la Lepra puede afrontar lo que viene. A su vez, las probables salidas de Aníbal Moreno o Jerónimo Cacciabue al exterior son antecedentes de que los chicos también pueden jugar.
6. ¿El equipo podrá dejar atrás los dramas físicos?
Hasta que no aparecen las derrotas, de la preparación física no se habla. Es uno de los axiomas más viejos del fútbol y muchas veces una forma de simplificar que, simplemente, se juega mal al fútbol. Pero lo cierto es que, durante el último semestre, la intensidad del equipo se vio disminuida respecto a los rivales. En los partidos ante rivales de mayor bagaje físico se vio lo más flojo de la Lepra, que tampoco tuvo tramos muy pronunciados de dominio en campo rival ante sus dificultades para recuperar. En muchos cotejos corrió de más, y en otros buscó imponer un ritmo bajo que tampoco pudo sostener. Sumado a ello, el cóctel de lesiones traumáticas y musculares le fue restando opciones a Kudelka a lo largo del certamen. Se puede exigir más de la puesta a punto física a cargo de Mauro Ceruti, como también es preciso destacar que así como hay una preparación enfocada al músculo, hay otra enfocada al juego. Newell’s no tiene que correr de más, tiene que correr mejor. El desafío, entonces, será encontrar el equilibrio entre juventud y experiencia y gestionar bien las cargas: su calendario podrá llegar a tener hasta 20 partidos oficiales durante el semestre y el trajín no podrá admitir otro semestre con soldados caídos por doquier.
7. ¿Cuánto influirá el año electoral?
En su última aparición pública, Sebastián Peratta dio a entender entre líneas que el 2021 leproso estará teñido de un intenso color político. Las elecciones presidenciales ya son tema de conversación en el Mundo Newell’s incluso desde hace varios meses y serán una referencia latente tanto en los medios de comunicación como en el plantel tras bambalinas. Maniobras electoralistas, operaciones de todo tipo, las glorias del club tomando partido -o no- y el pueblo rojinegro que, virtualmente, quedará partido en dos: oficialistas y opositores. Y con fría lógica, los resultados futbolísticos a lo largo del año también serán un factor gravitante a la hora de modificar ánimos o marcar territorio a la hora de los armados electorales. Tarea también para Frank Kudelka y su cuerpo técnico: aislar lo máximo posible a su plantel de la puja electoral y del fuego amigo institucional.
8. ¿Los refuerzos serán refuerzos?
Como en cada nueva ventana de pases que se abre, las expectativas se renuevan con la salida al mercado. Sin embargo, la performance leprosa de los últimos años en este ítem deja mucho que desear. Los impedimentos económicos y mucha mala praxis desde la gestión deportiva mantienen escépticos a gran parte de sus hinchas. Durante los últimos años, donde desfilaron laterales, centrales, mediocampistas y delanteros de todo tipo, sólo un puñado de incorporaciones fueron refuerzos que aportaron al equipo. De cara a lo que se viene, tanto propios como ajenos a la entidad leprosa coinciden en que las prioridades serán un zaguero central y un centrodelantero, a la luz de un dramático semestre defensivo y de la acefalía en el centro del ataque tras la lesión de Scocco durante la Copa Maradona. Para que Newell’s redondee un buen mercado, las claves girarán en torno a buscar jugadores complementarios a las características del plantel, idóneos con la idea del entrenador, con proyección de reventa y cuyo arribo se pueda dar lo antes posible, respecto a lo acotado del calendario.
9. ¿Será el último año de Maxi Rodríguez?
El pasado 2 de enero, el capitán rojinegro cumplió 40 años. Y en los próximos días, también se cumplirá un año de que la Fiera cambió formalmente su posición. De aquel extremo determinante que volvió al país en 2012 sólo quedan los recuerdos, y esta versión actual nos lo muestra asentado como mediapunta, liberado de las responsabilidades defensivas y con mayor peso en la circulación producto de su posición más centralizada. Sin embargo, su último semestre mezcló actuaciones decisivas con cotejos en el que fue absorbido por las defensas rivales, que sólo lo dejaron participar de espaldas. La influencia de Maxi Rodríguez en el armado del equipo es muy condicionante y los desafíos leprosos del 2021 obligan tanto al crack como al entrenador a un trabajo mancomunado: Kudelka deberá gestionar los momentos, los minutos y los movimientos de la Fiera y éste disponer de su plena jerarquía al servicio del equipo. Bien rodeado y con una puesta a punto adecuada, el 2021 de Maxi podrá significar el broche de oro a su prestigiosa carrera. A veces menos es más y la respuesta más allá de este año sólo la tiene Maxi.
10. ¿Podrá Newell’s optar por un título en el 2021?
El primer semestre de 2021 le presentará a la Lepra otro torneo local, de diferentes características a la de la última Copa Maradona pero con el común denominador de ser corto y por zonas. Lo ocurrido hasta aquí puede servir de lección, aunque hay que ser realistas: por supuesto que Newell’s tiene material para dar más, pero también tendrá la misión de reforzar al equipo y elevar la propuesta de Kudelka hacia un horizonte más convincente desde el fútbol y los resultados. A la espera del sorteo, La Copa Sudamericana aparece como la gran obsesión del pueblo leproso y la edición venidera supondrá la última gran función de una generación de glorias rojinegras. El club deberá estar al altura y gran parte de la exigencia depositada en el plantel va de la mano con lo que pueda ofrecer el equipo en el plano continental, una ventana en la que la Lepra no logra ser competitiva desde aquella aventura copera de 2013. Armar un plantel en función de los objetivos, pensar en grande y retomar la senda del crecimiento futbolístico. Tres requisitos para que Newell’s pueda soñar.
Planeta Newells | A Dos Canchas