“Quiero tener mucho recorrido en Newell’s y lograr éxitos deportivos”. Así de compenetrado está Kudelka con la institución. Al entrenador se lo nota feliz en el Parque. Pero esa alegría se combina con un alto grado de responsabilidad y autosuperación. Lo que se viene será menos desgastante que la pelea por la permanencia pero mucho más ambicioso. En ese sentido, la Lepra ya puso primera. A casi medio año después del último partido oficial, el primer equipo retomó los entrenamientos y se prepara para jugar una competencia que aún no tiene una fecha diagramada. En este escenario incierto, primero el preparador físico Mauro Ceruti y luego Kudelka, pero siempre en forma coordinada y mancomunada, trataran de poner a punto a un plantel que ni siquiera podrá entrenarse en conjunto por al menos dos semanas. Un desafío difícil y atípico.
Una vez que los futbolistas estén en condiciones aptas desde lo físicas, el entrenador deberá tomar la posta para luego amalgamar las piezas en su esquema predilecto de 4-3-3 y afianzar su ya conocida filosofía futbolística. Cuenta con una base importante producto de un plantel conformado con jugadores de experiencia que ya demostraron su capacidad, incluso en diferentes momentos de la institución. En esta línea, Scocco se sumará al frente de ataque y le dará a Kudelka una opción formidable para la cuota goleadora, el juego asociativo y los remates de media distancia. Este será el trabajo menos osado para Frank: Nacho conoce al club y un jugador de esa calidad no necesita tiempo de adaptación ni indicaciones excesivas.
Claro que el principal inconveniente hoy radica en la zona defensiva, específicamente en la zaga. Allí se solidificó uno de los puntos altos de la Lepra en la temporada pasada. Lo cierto es que más allá de las dilatadas negociaciones y de aristas que no corresponden a sus funciones, la misión del entrenador será, en caso de que Lema y/o Gentiletti no continúen, encontrar los reemplazantes ideales para atenuar esas posibles salidas. Por ello solicitó la incorporación de Guanini. Además, como los equipos defienden en bloque, también serán claves el retroceso y el trabajo táctico en conjunto.
Otro punto a destacar y que es de vital importancia para el futuro y presente del club es la inserción de juveniles. Su inclusión debe ser una política institucional y Newell’s apunta a ello con un gran organigrama de trabajo. Kudelka le dio oportunidades a Nadalín, Cacciabue, Moreno, González, Castro, etc. Ahora, ante otro contexto y panorama, deberá apelar a su sabiduría para introducir a otros jóvenes que piden pista y que ya se están entrenando con el primer equipo como Juan Ignacio Sforza, Manuel Llano, Mateo Maccari, Ramiro Sordo, Brian Aguirre, Enzo Cabrera y Tobías Donsanti. Lógicamente, tal como destacó el propio Enrique Borrelli, todos deberán estar preparados para el alto nivel de exigencia que imprime el entrenador. Precisamente esa es una de sus características distintivas.
Ante estos objetivos, lo primordial es que Frank Darío Kudelka ya demostró credenciales y sus antecedentes lo avalan. Es un DT que no deja detalle librado al azar, se caracteriza por su minuciosidad y por explicar, con conceptos claros, lo que pretende de su equipo. Por lo general, esas palabras luego se plasman y se convierten en realidad en el campo de juego. Sucedió en sus ciclos en Unión y Talleres. Y también en Newell’s. No es un dato menor que ya conozca al club y a la gran mayoría de sus dirigidos. Los jugadores confían en él porque es un técnico que, a merced de su conducta y trayectoria, convence con su conocimiento y sabiduría y transmite paz con su conducta. Tiene desafíos por resolver en una situación extraordinaria y particularmente especial. Pero no menos difíciles que cuando arribó al Parque hace poco más de un año. Ahora deberá potenciar lo que construyó y apuntar a un salto de calidad. Él es consciente, por el plantel con el que cuenta, que las pretensiones y los objetivos serán mayores.

Licenciado en Comunicación Social. Master en Periodismo Deportivo.
Periodista en De Leprosos y Canallas. Redactor en Planeta Newell’s