El Rojinegro está lejos de las expectativas. Tiene jugadores en el frente ofensivo para ser candidato, la jerarquía es algo que se percibe a simple vista, pero contra Talleres y Boca, poco pudo inquietar a sus rivales. Sobre todo en el último partido, un cotejo en el que Newell’s puso muchísimas fuerzas para molestar a Andrada, pero que, jamás pudo ponerlo cara a cara con el arquero.
El entrenador es consciente de esto. Fue lo primero que admitió en conferencia de prensa. A quién escribió esta la nota le marcó: “teníamos muy buena posesión y muy buena circulación, pero no pudimos completar sobre el área de ellos”. A su vez, reconoció que la efectividad no fue la deseada: “no vimos la profundidad reflejada que queremos de acuerdo a la cantidad de tiempo que tuvimos el balón”. Y ahora, cómo se sigue, ¿será momento de cambiar?
Para Kudelka, el problema pasó por la cantidad de futbolistas que pisó el área: “no teníamos la cantidad de gente necesaria donde debíamos tenerla”, expresó. Es un cambio con respecto al partido anterior en su análisis. Después del cotejo contra los cordobeses, había dicho que su equipo no jugó bien, pero ese día atacó a la imprecisión general. Ayer, en una modificación en su óptica, habló de cuestiones tácticas. Por eso mismo, ¿Es posible una varianza en el esquema táctico? “Es una opción, puede ameritar un cambio de sistema”, dijo el Director Técnico.
La realidad es que no tiene demasiados futbolistas para otro formato. Es un plantel con sobre abundancia en riquezas técnicas en la mitad de la cancha, prácticamente sin carrileros y tampoco tiene un nueve alternativo para luchar con rudezas contra zagueros rivales. De igual manera, Kudelka está obligado a rever su equipo: ya sea a partir de cambios de nombres o de táctica, tiene que pasar algo distinto, para que Newell’s obtenga otros resultados.
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