“Nos quedamos con bronca por no haber ganado”. Esa fue la primera impresión y declaración de Stefano Callegari en la entrevista que brindó en Al Fondo De La Red. Supo ganarse un puesto entre los 11, relegando al banco a un jugador que llegó como refuerzo como Teodoro Paredes. Volviendo al clásico, el partido más importante del mundo para los rosarinos como lo expresó Héctor Bidoglio, el defensor reconoció: “Quizás nos está faltando un poco de profundidad en los últimos metros para poder conseguir los tres puntos”. Y agregó: “En juego y en dinámica, el equipo está haciendo un trabajo muy bueno e interesante”.
“El resultado me pareció justo porque no sobraron situaciones de gol. La más clara de ellos fue de un rebote y la nuestra un cabezazo en el primer tiempo. No hubo un equipo que haya generado más que el otro o haya estado más cerca de ganar. Fue un partido muy trabado y parejo. Ellos vinieron con la idea de esperar y salir rápido y a nosotros nos costó poder pasar 3/4 de cancha. Manejamos la pelota en zona inofensiva y no tuvimos profundidad”, analizó.
Callegari, muy claro y preciso en sus respuestas, no se puso el casette y expresó que “ellos marcaron muy bien a Formica, Maxi y Figueroa, que son muy importante para nosotros generando el ataque, y se nos complicó”. Igualmente, opinó que “ninguno de los dos hizo méritos suficientes para ganarlo”.
El defensor, todavía con pocos partidos en Primera pero que va creciendo a paso firme, afirmó: “Mejoramos en la pelota parada. Ayer (domingo) no nos cabecearon en ninguna salvo la del final que fue de un rebote y le cayó a Herrera pero después, últimamente estamos fuertes en esa faceta. El motivo de la mejora fue el convencimiento”.
Tampoco podía falta el elogio al entrenador, que es el responsable de que Stefano tenga continuidad y mejore día a día en su rendimiento: “Héctor (Bidoglio) nos dio muchas herramientas, es una persona que trabaja muy bien y el equipo se siente a gusto con la idea. Tenemos jugadores de muy buen pie, de mucha experiencia y creo que estamos mostrando a un Newell’s más ofensivo. Hemos cambiado la forma de jugar”.
El joven de 22 años no quiso escaparle a la polémica en la previa del clásico sobre los elementos que se encontraron en el vestuario visitante. De todas maneras, no quiso llevar el problema a mayores y confesó que al vestuario de Newell’s no llegó ninguna versión sobre una posible suspensión del partido ni sobre alguna postergación de tiempo. “Nosotros no estábamos al tanto de la situación”, dijo.
“El clásico es un super emocional, es un partido que, a veces, se juega más con las emociones que con fútbol. Se preparan de otra manera porque siempre terminan siendo luchados en donde no salen las cosas como uno las planea”, explicó el contexto en el que se vive y se juega el partido más esperado de todos. Y sostuvo: “El momento del partido te va llevando, jugas más con las pulsaciones propias y las del rival, y no tanto tácticamente”.
Así como cuando juega, Callegari fue preciso y siguió repartiendo buenos comentarios sobre sus compañeros. “Alan (Aguerre) es un arquerazo. Nosotros sabemos que cuando lo llaman, siempre responde. Nos da esa cuota de tranquilidad que si la pelota, pasa cae donde está parado él”.
“Sabíamos que teníamos un arranque muy complicado, no sólo por el clásico sino que también teníamos dos rivales difíciles (Boca y Unión). Nuestro objetivo es sumar puntos. No nos sacamos una mochila de encima con el partido ante Central, tenemos que dar más, sumar puntos y subir en la tabla”.
Finalizando con sus declaraciones, Callegari puso el foco a lo que será el próximo encuentro de la Superliga: “El sábado tenemos la obligación de ganar como sea. Es un rival complicado que hace muchos encuentros que no gana. Nosotros venimos en levantada por más que no hayamos podido ganar todavía, pero tenemos que ratificarlo consiguiendo una victoria”.
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