“Los equipos se arman de atrás para adelante”, reza un viejo refrán futbolero que alguna vez patentó Carlos Bianchi. Y Newell’s puede dar fe de eso: Lema y Gentiletti, los zagueros del equipo de Kudelka, conformaron una dupla defensiva eficiente y fueron pilares fundamentales en la buena temporada que tuvo el conjunto rojinegro. A pocas semanas de que comiencen los entrenamientos, no hay certezas de que ambos sigan en la institución. Y, más allá de la reciente incorporación de Guanini, el objetivo es que los dos continúen. Lo del ex jugador de Belgrano es una misión muy difícil; mientras que la situación del ex defensor de San Lorenzo parece más factible, ya que tiene contrato vigente.
Para poner en contexto la dificultad que implicó asentar una dupla de zagueros, es importante resaltar que, desde el título obtenido en 2013, la Lepra nunca pudo consolidar un ‘2’ y un ‘6’ que transmitan confianza, liderazgo y buenos rendimientos. Los últimos fueron Vergini y Heinze, aunque también se pueden mencionar, con algunas intermitencias, a Formiliano y Moiraghi. En este caso, Lema y Gentiletti son futbolistas complementarios: uno es derecho, el otro es zurdo; el Sicario se destaca en el juego aéreo, Santiago en la sobriedad y salida limpia desde el fondo. Pero claramente comparten una certeza: con diferentes matices, ambos le dieron un salto de calidad a la defensa leprosa y fueron ejes fundamentales en la estructura del equipo.
En este sentido, vale mencionar que, en el mercado de pases y de acuerdo a las posibilidades económicas de Newell’s, es casi una quimera encontrar un zaguero de la jerarquía de ambos jugadores. Contratar a dos de ese calibre, sencillamente parece una utopía. Habría que agudizar el ingenio, tentar a la suerte y toparse con negociaciones accesibles, sin competidores que estén en condiciones de hacer erogaciones más caudalosas. Además, en los últimos años no surgieron zagueros de inferiores de nivel destacado o al menos que se les haya otorgado rodaje sostenido en Primera, como por ejemplo fue el caso de Lisandro Martínez, de cualidades comprobadas.
Al margen de que ambos fueron claves, una hipotética salida de Gentiletti sería más resonante para el ambiente rojinegro. Ya que en todo momento se supo que lo de Lema era una negociación muy complicada y porque es muy difícil encontrar zagueros zurdos en el mercado que puedan equiparar su nivel. Lo concreto, es que la historia leprosa estuvo marcada a fuego por grandes duplas de zagueros que el hincha recita de memoria: Gamboa – Pochettino, Maidana – Domínguez, Vergini – Heinze, etc. Y si las buenas actuaciones de estos defensores de Kudelka se sostienen en el tiempo, pueden escribir su propia página de gloria.
Más allá de los aportes defensivos y los cinco goles de Lema, ambos aportan voz de mando desde el fondo y Gentiletti, pese a no tener pasado en el club, se transformó en un referente y líder del equipo, a partir de su personalidad. Fueron titulares en 21 de los 24 partidos de la última Superliga y solo se ausentaron por sanciones disciplinarias, nunca por decisión táctica. Los dos tienen el reconocimiento y cariño de la gente, ya que los hinchas son testigos de que para armar un equipo competitivo hay que contar con una defensa que inspire seguridad. Y conciben también que no solo son determinantes los futbolistas que hacen la diferencia en el área contraria. De hecho, en este sentido, Newell’s ya tiene en Maxi Rodríguez, Scocco, Formica, Palacios y compañía, a interpretes de sobra para cumplir con esta faceta. Ahora falta confirmar a dos baluartes en la retaguardia, los muros del sistema defensivo rojinegro. Y, en ese contexto, nada mejor que recurrir a dos viejos conocidos que brindan garantías: Lema y Gentiletti.
Licenciado en Comunicación Social. Master en Periodismo Deportivo.
Periodista en De Leprosos y Canallas. Redactor en Planeta Newell’s