Newell’s perdió otra vez el partido más importante del semestre. En un partido que tuvo un marco parejo, el equipo de Méndez careció de ideas para inquietar a Broun. En el primer tiempo, el partido prácticamente no tuvo situaciones. En el segundo tiempo, el gol anulado y la expulsión de Angelo Martino le dieron una ventaja al local que supo aprovechar con la pelota parada sobre el final.
La actitud: El equipo no tiene funcionamiento alguno, pero la actitud para disputar el partido no estuvo a la altura de lo que ameritaba este cotejo.
Inseguridad defensiva: Aun cuando el partido estaba igualado, Newell’s fue un desconcierto total. Una insistencia excesiva para salir jugando por abajo con jugadores que esta estrategia no los beneficia.
El partido de los extremos: Panchito González nuevamente jugó un mal partido. Varios contragolpes desperdiciados y muchas pelotas perdidas. Méndez tiene responsabilidad sobre esto porque insistió para que el jugador se quede. Besozzi no pesó en el partido. Llegó hace muy poco y que haya jugado de titular en el clásico es demasiada responsabilidad.
El gol: Newell’s sufrió un gol derivado de una pelota parada. Floja respuesta de Macagno y nula marca sobre Mallo que partió desde la propia barrera rojinegra.
Los cambios de Méndez: Las modificaciones del entrenador llegaron muy tarde al partido. Los extremos que no respondían. Rodrigo Cedeño estaba al borde de la expulsión y el entrenador no reaccionó a tiempo. Sorprendió el poco tiempo de Cardozo en cancha teniendo en cuenta que llegó como una de las grandes promesas del mercado de pases.