El equipo de Ricardo Lunari consiguió un punto con sabor amargo en cancha de Riestra. En un partido donde tuvo todo para ganarlo desde el comienzo. Newell’s, sin ser un equipo arrollador, desde temprano ganaba el encuentro dos a cero gracias a errores del arquero local y jugaba con un hombre más. Sobre el final de la primera etapa, con un penal más que dudoso, el local descontó y en la jugada siguiente empató el encuentro. Durante el segundo tiempo, Newell’s siguió buscando ponerse en ventaja y lo logró sobre el final, pero en la última jugada del partido, el equipo de Fabbiani terminó empatando el encuentro por otra grave desatención defensiva.
- El ingreso de Tomás Pérez: A diferencia del partido con Tigre, el entrenador leproso eligió a Tomás Pérez para que reemplace a Valentino Acuña y le diera más marca al mediocampo. En su ingreso estuvo a la altura de las circunstancias y durante el segundo tiempo, sin Cedrés, logró mantener el orden y la convivencia futbolística con el debutante Altamirano.
- El partido de Banega: Nuevamente, el entrenador apostó por Banega recostado sobre la izquierda. Ofensivamente, jugó un muy buen partido, destacándose principalmente por la banda, aunque también aprovechó la libertad de movimientos para aparecer en otros sectores. Cabe destacar que Lunari debe resolver sus problemas defensivos, ya que el segundo gol de Riestra provino de un centro de un jugador que Ever debía marcar. A pesar de esto, Banega redondeó un buen partido, anotando su primer gol desde su regreso con la rojinegra.
- El ataque leproso: Sin dudas el gran acierto de Lunari es el ingreso de Mateo Silvetti, clave hoy por su rendimiento y por los dos goles convertidos. Por otra parte, la nueva idea del entrenador de jugar con dos centrodelanteros volvió a carecer de química. Sin embargo, si se analiza individualmente a cada uno, Juanchón tuvo un partido muy superior al del uruguayo, exigiendo con la presión y, fundamentalmente, ganando en el juego aéreo. Jugó un buen partido.
- La defensa: Otra vez, la última línea leprosa tuvo un rendimiento horroroso. Jugando contra un equipo que exigió poco, siempre parecía que, al llegar al área de Newell’s, el local lo podía dañar, y así lo hizo. Méndez sigue sin ser el que fue, la dupla central perdió los duelos con Herrera y también con el arquero Arce en la última jugada del partido. Ángelo Martino, por su parte, juega cada vez peor.
- El arbitraje: Si bien Newell’s tiene muchas cosas que resolver futbolísticamente, no se debe dejar pasar que otra vez el equipo rosarino fue perjudicado. La remontada del local comenzó con un penal muy dudoso, donde no hay ninguna imagen que demuestre fehacientemente que hubo falta de Ángelo Martino.