Se pusieron la Leprosa: Franco Lazzaroni

Seguramente pocos recuerden que Franco Lazzaroni tuvo un paso de su carrera por Newell’s, otros directamente no se debían acordar o no lo conocían, pero antes de llegar el rojinegro jugó en varios equipos. Comenzó en las inferiores del Club Domingo Faustino Sarmiento de Santa Fe. Allí se empezó jugando de nueve y fue goleador varios campeonatos, pero después le encontraron el puesto en la defensa. De ser goleador a evitar que los hagan sin escala y con motivos pocos claros.

Su primer club en la era profesional fue Colón en la temporada 2008/09, sin embargo, su debut deportivo se produjo en nuestra ciudad, en Tiro Federal, dónde disputó 8 encuentros en un año. En junio de 2010, volvió al Sabalero pero sin mediaciones, fue enviado otra vez dos categorías más abajo para jugar con Racing de Córdoba en el Torneo Argentino A, equipo en el cuál también permaneció una temporada con mucha participación y ¡convirtiendo un gol!

Su etapa más larga en lo que va de su carrera profesional la tuvo en Defensa y Justicia, jugando dos años cuando aún estaba en el Nacional B. En el equipo de Varela fue donde tuvo más continuidad y regularidad presenciando un total de 67 encuentros. Su rendimiento allí hizo que Newell’s se fijara en él y así tener revancha nuevamente en la máxima categoría del fútbol argentino.

En medio de la gloria Rojinegra, a los 25 años, Lazzaroni tuvo un chispazo de suerte y arribó a la Lepra a mediados de 2013 en condición de libre. Sin cargo y sin opción de compra, todo un indicio. Pero, el técnico en aquel momento, Alfredo Berti parecía conforme. “Tengo una gran alegría por llegar a este club que hace varios años viene haciendo las cosas de la mejor manera y eso se ve reflejado. En lo personal estoy contento porque es un gran salto para mi carrera y feliz de llegar a un club con el prestigio de Newell’s“, fueron sus primeras declaraciones al Sitio Oficial.

Pero su estadía en el club estuvo lejos de ser todo color de rosas. Su llegada se oficializó el 16 de julio y recién debutó en abril de 2014 porque el entrenador, con el cuál llegó, no lo tenía en cuenta. Cuando Berti deja su cargo, el que tomó las riendas interinamente fue Ricardo Lunari y él fue quien le hizo jugar, sumando sólo 4 partidos.

¿Cuál fue el motivo de su poca continuidad? Que para lo que había llegado no se pudo dar. Gabriel Heinze había dado a entender al entorno que le quedaban pocas fichas y era inminente su que retiro del fútbol profesional. Tras la estrella ganada, con algunos convencimientos y la participación en la Copa Libertadores, el Gringo decidió continuar. Se habló de seis meses pero terminó siendo un año más y, al jugar en la misma posición que Lazzaroni, le imposibilitaba que sume minutos. Finalmente, Lunari lo hace debutar de local en un triunfo ante Tigre como lateral izquierdo ante las ausencias por lesiones de Milton Casco, Marcos Cáceres y Cristian Díaz. Aquel día tuvo un desempeño aceptable. Después de aquel día jugó tres encuentros más y se fue.

Luego, volvió al club de sus inicios, Colón, y comenzó su derrotero por el interior y algún país limítrofe. En su segunda etapa consiguió el logro deportivo más importante hasta el momento: el ascenso a Primera a final del mismo año en un torneo raro cuando el fútbol trataba de amoldarse al calendario europeo. Pasó a San Martín de San Juan dónde también su estadía duró 18 meses con 20 encuentros disputados.

Su recorrida continúó en el ascenso y regresó a la provincia pero para jugar 12 partidos en Atlético Rafaela. Tras un año, tuvo su primer y única experiencia en el exterior hasta el momento, ya que Sol de América de Paraguay se hizo con sus servicios a mediados de 2018. Sólo duró seis meses pero disputó la Copa Sudamericana. Siguió intentando, pero su trayectoria siguió en paulatina caída: se puso la de Ferro y Gimnasia de Jujuy,

En época de pandemia, el Lobo jujeño no le renovó el vínculo pero Franco Lazzaroni (32) se convirtió en nuevo refuerzo de Boca Unidos de Corrientes, equipo que milita en el Torneo Federal A.